Clientes de ADSL de Telefónica podrán querellarse libremente para pedir daños y perjuicios

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Clientes de ADSL de Telefónica podrán querellarse libremente para pedir daños y perjuicios

El Juzgado de lo Mercantil número 4 de Madrid ha dado un plazo de dos meses para que los clientes que usaron el ADSL de Telefónica entre septiembre de 2001 y diciembre de 2006 puedan unirse a la demanda colectiva interpuesta por la asociación de consumidores AUSBANC contra la compañía.

Todos aquellos usuarios del ADSL de Movistar entre septiembre de 2001 y diciembre de 2006 pueden unirse desde estos momentos a la demanda colectiva interpuesta por la asociación Ausbanc contra el operador por daños y perjuicio a sus clientes por abuso de posición dominante en el mercado mayorista de banda ancha.


Según un edicto publicado hoy en varios diarios españoles, la demanda ha sido admitida a trámite tres años y medio después de que fuera presentada, si bien su tramitación ha quedado suspendida hasta que se conozca el número exacto de consumidores que litigarán contra Telefónica.
En noviembre de 2007, la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (AUSBANC) presentó una demanda contra Telefónica en la que le solicitaba 458 millones de euros por los daños y prejuicios causados, a su juicio, a los consumidores por abuso de posición dominante en el mercado mayorista de banda ancha.

La presentación de la demanda se produjo después de que, en julio de aquel año, la Comisión Europea acordara imponer a Telefónica una multa de 151,875 millones de euros por un abuso "muy grave" de posición dominante en el mercado español de internet de alta velocidad.
La Comisión Europea sostuvo que, durante más de cinco años, Telefónica impuso a sus competidores unos precios abusivos por el uso de la infraestructura de banda ancha.


La Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) fue la responsable de esta demanda contra el operador, en la que se pedía una indemnización de 458 millones de euros. Telefónica habría aplicado durante ese largo periodo unos precios muy elevados al resto de operadores por hacer uso de la infraestructura necesaria para ofrecer a sus clientes el servicio de ADSL. Estos altos costes fueron trasladados al precio final, por lo que se considera que Telefónica abusó de su posición en el mercado, al ser el único operador con red propia para el acceso a las conexiones de ADSL.


Al estrechar los márgenes entre los precios mayoristas y los que Telefónica cobraba a sus propios clientes, las demás empresas se veían obligados a incurrir en pérdidas si querían igualar los precios minoristas de la operadora, señaló entonces la Comisión.


El Tribunal General de la Unión Europea celebrará el próximo 23 de mayo la vista oral por el recurso que presentó la operadora española contra la sanción de la Comisión Europea


Desde luego no parece el mejor momento el actual para el operador español, después de que se conociesen sus preocupantes datos de captación de clientes a finales de 2010 y la tendencia incluso peor en el presente 2011.
 
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