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Audi e-tron quattro, lo nuevo en tracción integral
El e-tron quattro de Audi emplea una transmisión híbrida en paralelo ayudada por un segundo motor. El motor delantero es un 2.0 TFSI de 210 CV y que aporta 350 Nm de par máximo entre 1.500 y 4.200 revoluciones por minuto. El motor eléctrico situado en la parte delantera está en funcionamiento continuo sincronizado (PSM) y genera 33kW (45 CV) de potencia y 211 NM de par.
El nuevo prototipo de Audi está basado en el A5, aunque su interior eléctrico híbrido es bastante distinto. La batería se puede conectar a través de los enchufes domésticos de 230V.
El vehículo se puede conducir en modo híbrido o totalmente eléctrico. En el modo eléctrico el e-tron alcanza una velocidad máxima de 100 km/h y puede recorrer hasta 40 kilómetros.
Si el conductor acelerase rápidamente el coche podría ofrecerle hasta 110 CV de potencia por un breve periodo de tiempo. Cuando se circula a velocidades altas entonces automáticamente entra el motor TFSI a hacerse cargo del trabajo principal, llegando a los 314 CV de potencia.
Como explican desde Audi, "el sistema de recuperación es especialmente eficiente gracias a la innovadora operación eléctrica de los frenos en el eje trasero. Los motores eléctricos actúan a través de la transmisión en los pistones que presionan las pastillas contra los discos. Los frenos electromecánicos se han ideado adecuadamente para trabajar en conjunto con el motor eléctrico de respuesta rápida en el eje trasero". Además, "esta rápida actuación eléctrica garantiza un control ultra preciso del programa electrónico de estabilidad (ESP)" apuntan.
Para aligerar el peso del vehículo, el chasis está construido en su mayoría en aluminio, aunque también incluye otros componentes elaborados con polímeros reforzados con fibra de carbono. Estos materiales aligeran el peso en más de 100 kilos, pesando menos de 1,6 toneladas.
El motor eléctrico extra mueve el eje trasero repartiendo la potencia entre las dos ruedas. Tiene una potencia de más de 60 kW (81 CV) y aporta un par máximo de 300 Nm. Unos engranajes electrohidráulicos superpuestos controlan el funcionamiento del motor lo que permite una distribución dinámica de la fuerza de empuje. Si por ejemplo el coche acelera en mitad de una curva, "la potencia fluye predominantemente hacia la rueda esxterior, presionando virtualmente al e-tron quatrro en la curva" explican desde Audi.
El e-tron quattro de Audi emplea una transmisión híbrida en paralelo ayudada por un segundo motor. El motor delantero es un 2.0 TFSI de 210 CV y que aporta 350 Nm de par máximo entre 1.500 y 4.200 revoluciones por minuto. El motor eléctrico situado en la parte delantera está en funcionamiento continuo sincronizado (PSM) y genera 33kW (45 CV) de potencia y 211 NM de par.
El nuevo prototipo de Audi está basado en el A5, aunque su interior eléctrico híbrido es bastante distinto. La batería se puede conectar a través de los enchufes domésticos de 230V.
El vehículo se puede conducir en modo híbrido o totalmente eléctrico. En el modo eléctrico el e-tron alcanza una velocidad máxima de 100 km/h y puede recorrer hasta 40 kilómetros.
Si el conductor acelerase rápidamente el coche podría ofrecerle hasta 110 CV de potencia por un breve periodo de tiempo. Cuando se circula a velocidades altas entonces automáticamente entra el motor TFSI a hacerse cargo del trabajo principal, llegando a los 314 CV de potencia.
Como explican desde Audi, "el sistema de recuperación es especialmente eficiente gracias a la innovadora operación eléctrica de los frenos en el eje trasero. Los motores eléctricos actúan a través de la transmisión en los pistones que presionan las pastillas contra los discos. Los frenos electromecánicos se han ideado adecuadamente para trabajar en conjunto con el motor eléctrico de respuesta rápida en el eje trasero". Además, "esta rápida actuación eléctrica garantiza un control ultra preciso del programa electrónico de estabilidad (ESP)" apuntan.
Para aligerar el peso del vehículo, el chasis está construido en su mayoría en aluminio, aunque también incluye otros componentes elaborados con polímeros reforzados con fibra de carbono. Estos materiales aligeran el peso en más de 100 kilos, pesando menos de 1,6 toneladas.
El motor eléctrico extra mueve el eje trasero repartiendo la potencia entre las dos ruedas. Tiene una potencia de más de 60 kW (81 CV) y aporta un par máximo de 300 Nm. Unos engranajes electrohidráulicos superpuestos controlan el funcionamiento del motor lo que permite una distribución dinámica de la fuerza de empuje. Si por ejemplo el coche acelera en mitad de una curva, "la potencia fluye predominantemente hacia la rueda esxterior, presionando virtualmente al e-tron quatrro en la curva" explican desde Audi.
