La nueva Administración de Donald Trump ha derogado una LEY de Barack Obama a favor de los transexuales, una medida que choca frontalmente con los valores impuestos en la compañía de Cupertino por su CEO Tim Cook.

Una de las medidas estrella de la Administración Barack Obama fue sin duda reconocer el matrimonio igualitario entre personas del mismo sexo. Además, una LEY para acabar con la discriminación de estudiantes transexuales en las escuelas de Estados Unidos. Esta LEY permitía que los escolares puedan utilizar el baño y vestuarios que coincidan con la identidad de género elegida por cada estudiante.

Con la llegada de Donald Trump, da un giro inesperado y afirma que la ley no incluye la garantía de acceder al baño o vestuario del género con el que se identifica el estudiante. Trump se apoya en una sentencia judicial que asegura que la palabra ‘sexo’ en esa ley federal se refiere de modo inequívoco al sexo biológico y no a cómo se pueda sentir el estudiante.

En otras palabras, Donald Trump dice que hay muchos padres que no quieren que su hija de 6 años compartan vestuario con otra ‘niña’ de 16 años con pene.

Apple con su CEO Tim Cook que afirmó públicamente que es gay y además que ser gay es un Don de Dios, ha protestado por segunda vez contra las medidas de la nueva Administración Trump. Apple ha publicado un comunicado oficial:

Apple cree que todo el mundo merece la oportunidad de prosperar en un ambiente libre de estigma y discriminación. Nosotros apoyamos los esfuerzos para una mayor aceptación, no menor, y creemos firmemente que los estudiantes transexuales deben ser tratados con igualdad. No estamos de acuerdo con cualquier esfuerzo para limitar o rescindir sus derechos y protecciones.

Apple es la segunda vez que protesta junto a otras tecnológicas del país, en particular contra las medidas inmigratorias que limitaba el acceso a los Estados Unidos a personas de siete países. Google incluso dio un paso adelante y creó un fondo de recaudación para cuatro grupos defensores de los derechos de los migrantes en los Estados Unidos. Google donó dos millones de dólares.

No está muy clara la postura de Tim Cook, pero quizás Apple pase de la ‘basura activista’ a la acción y cree un fondo con una donación inicial de 2 billones de dólares en asociaciones LTBG.

Quizás pueda utilizar su reciente Apple Park para recoger refugiados rechazados por la Administración Trump. Y por supuesto Apple podría crear una fábrica en México y otra en Cuba para el iPhone, así los mexicanos y cubanos no tendrían que entrar en Estados Unidos ilegalmente a buscar trabajo. Le haría mucha ilusión al cubano Eduardo Cue, Vice Presidente de Internet Software y Services de Apple.