Muchos fanboys del iPhone pensaban que sus iPhones explosivos eran exclusividad de ellos o de los smartphones Galaxy, pero va a ser que no.

Es conocido que el importador de aparatos chinos Apple aprovecha al máximo los componentes, de hecho, en Applesana ya por el 2009 los usuarios se dieron cuenta que al comprar un reluciente MacBook Pro 2010 venía con una batería usada del 2008. O que compraban un nuevo y reluciente iPhone 4S y se lo enviaban con una pantalla usada de iPhone 4 llena de píxeles muertos.

Y es que como sabes, todos los MacBooks, iPhones e iMac usados o rotos acaban en Irlanda para ser desmontados y aprovechar al máximo algunos de sus componente para incluir en nuevos modelos. En Apple no se tira nada.

Si son iPhones más difíciles de desmontar, Apple confirmó en la anterior KeyNote que los envía directamente a Pegatron donde son desmontados con el robot Liam para revenderlo otra vez como nuevos con una nueva carcasa, el más descarado fue el iPhone 5c basado en el fiasco iPhone 5 que se desconchaba.

Y eso le ha pasado a Daniel Dourvaris, que ha descubierto que su flamante MacBook Pro Retina venia equipado con una de esas baterías defectuosas usadas que tienen la fea costumbre de arder espontáneamente sin necesidad de estar cargando. Arden por si.

Dourvaris dice que estaba en la cama ‘cancaneando’ mientras navegaba por internet y de repente el MacBook Pro se apagó. Fue a encenderlo otra vez y comenzó a echar ese humillo blanco típico de que viene algo gordo, y tan gordo porque mira las imágenes de cómo ha quedado.

Por suerte solo hay que lamentar daños personales y un par de ampollas al quemarse los dedos. No hay víctimas humanas ni tampoco el inmueble quedó destruido porque estaba despierto, ni siquiera tuvo que llamar al 112.

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